¿Señales de humo antes del ataque?

Financiado por Bloomberg Philanthropies, el nuevo informe de la OMS indica que la mayoría de la población mundial está protegida por al menos una iniciativa esencial de control del tabaco. Pide avances más rápidos y dice que «donde no estén prohibidos, los ENDS deben ser estrictamente regulados.»

El Informe de la OMS sobre la Epidemia Global de Tabaco 2023, que se publica cada dos años, pretende evaluar el progreso mundial en el control del tabaco mediante el análisis de políticas establecidas en 2003 por el Convenio Marco de la OMS para el Control del Tabaco (CMCT). Este convenio es un tratado internacional de salud pública que exige que los países partes implementen medidas consideradas  probadas  para reducir el consumo de tabaco y sus consecuencias para la salud pública. Dichas medidas incluyen la implementación de espacios públicos libres de humo, prohibición de publicidad, reducción de la demanda mediante incremento de precios e impuestos y etiquetas de advertencia en los productos de tabaco.

De acuerdo con el más reciente informe, publicado el pasado 31 de julio, actualmente 5,6 mil millones de personas, más del 70 por ciento de la población mundial, están protegidas por al menos una política de control del tabaco preconizada por el Convenio Marco. Un número cinco veces mayor que en 2007. 

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