Tanto con el voltaje como amperaje controlas la salida de potencia. La cosa es que si modificas uno, no puedes modificar el otro por ser valores dependientes; es decir, que si le metes más o menos voltios a un mismo atomizador, los wattios cambian y al contrario igual, de modo que si ajustas el valor de uno (en un dipostivo regulable) se salta los posibles ajustes que tengas en el otro modo.
La diferencia es que si ajustas los wattios, el dispositivo siempre sacará los mismos independientemente de la resistencia que le pongas mientras que si aumentas los voltios, los wattios cambiarán en función de la resistencia.
Así por ejemplo, no es lo mismo meterle 3.7 V a una resistencia de casi 2 ohm (lo habitual en los clariconos básicos) que meterle el mismo voltaje a una resistencia muy baja de 0.2 ohmnios, que producirá unos 68 wat mientras que en el primer caso se producirían 6.
Con los ejemplos de más arriba, si aumentas los voltios en ambos casos subirán los wattios, mientras que si aumentas los wattios de salida en un regulable, pues serán los que marques, no la salida a pelo sin regular.
A la vista de esta situación tenemos dos medidas adicionales que son importantes. La primera son los miliamperios por hora (mha), que es lo que determina la capacidad de carga la batería. Es, por así decir, la "gasolina del depósito". Como es lógico, si le aumentas voltios o watios, es como si pisas el acelerador, que corres más pero gastas más también. Ésa es la razón también por la que notas que conforme se descarga la batería, tira con menos fuerza: a menor carga, la salida de potencia cada vez es menor. A mayor capacidad de carga de la batería, más tardas en notar esa caída pero no es un indicador 100% estable: cada marca de batería tiene una caída de potencia distinta. Cuanto mejores son, menos se nota y más tarda en llegar.
Y por último, quizá la medida más importante de cara a que tengas un feliz vapeo y con seguridad: los amperios. Los amperios son importantísimos por una razón sencilla: son el límite de seguridad para que la química de la batería no se vuelva loca, empiece a calentarse una burrada e incluso te llegue a estallar en los morros. Es un valor que típicamente no lo encontrarás en la pegatina de la batería (te dirá los voltios y los mha) pero en google puedes encontrarlo. Tira de una calculadora de la ley de ohm para saber de antemano la carga que le estás metiendo a tus baterías: sólo necesitas saber la resistencia en ohmios y los voltios (o wattios) de salida.
Compara ambas y si ves que los amperios máximos de salida de la batería no llegan a ser suficientes para lo que quieres hacer, rebaja bien los wattios, bien los voltios o si no puedes en ninguno de los dos casos (lo que te pasaría con un mod mecánico sin regulación), pon algo con una resistencia más alta. Mejor calcular con el papel o la pantalla antes que tener sustos.