Lo cierto es que el mercado del vapeo está creciendo, que los comerciantes han puesto su punto de mira en este mercado y por tanto han comenzado a encarecer el producto, a utilizar a las cabezas visibles del mundillo para promocionar productos y a crear nuevos promotores.
Todo esto, que debería ir en provecho de los consumidores aumentando la oferta y la diversidad, en realidad, dirige el consumo a todo aquello que resulta más beneficioso económicamente.
Esto no es un juicio ético sobre las personas que en un marco legal trabajan para ganarse la vida, pero sí es un grito de protesta porque no muy a la larga, los vapeadores vamos a tener que rascarnos más el bolsillo y lo que para muchos fue un modo de abandonar el cigarrillo y posteriormente se convirtió en un hobbie, terminará apestando a comercialismo puro y duro.
De todos modos, el litro de líquido ronda los 400 euros y eso, señores míos es claramente un precio abusivo. Los márgenes que están quedándose algunos son bestiales y el promocionar aparatos que consumen barbaridades de líquido no va precisamente encaminado a beneficiar al consumidor que está mediatizado por la publicidad pagada.
Todo esto, que debería ir en provecho de los consumidores aumentando la oferta y la diversidad, en realidad, dirige el consumo a todo aquello que resulta más beneficioso económicamente.
Esto no es un juicio ético sobre las personas que en un marco legal trabajan para ganarse la vida, pero sí es un grito de protesta porque no muy a la larga, los vapeadores vamos a tener que rascarnos más el bolsillo y lo que para muchos fue un modo de abandonar el cigarrillo y posteriormente se convirtió en un hobbie, terminará apestando a comercialismo puro y duro.
De todos modos, el litro de líquido ronda los 400 euros y eso, señores míos es claramente un precio abusivo. Los márgenes que están quedándose algunos son bestiales y el promocionar aparatos que consumen barbaridades de líquido no va precisamente encaminado a beneficiar al consumidor que está mediatizado por la publicidad pagada.