Sixto la oferta no se puede subir, tiene que seguir a la demanda, es un mercado en desarrollo lo han dinamitado en su comienzo las farmacéuticas y tabacaleras y ahora que podía levantar cabeza no se porque alguien lo intenta socabar con esto, los precios se ajustaran si las tiendas sobreviven, las páginas web están bien, se puede conseguir algo mejores precios porque tienen menores costos y llegan hasta la última aldea, pero el comercio a pie de calle es fundamental hay mucha gente que nunca lo probara si no se lo ofrecen cara a cara
No estoy de acuerdo.
Conozco pocos productos que hayan tenido un lanzamiento tan masivo y con tanta distribución como los productos del vapeo han tenido. El vapeo ha fracasado como producto mainstream, no ha gustado a muchos de los que los probaron, es un producto de masas fracasado, y no es una opinión, es un hecho.
Tampoco ha resultado ser un método de dejar de fumar radicalmente distinto a otros, aunque sea de gran ayuda y bata a otros en varias veces en efectividad. Los que lo han dejado con vapeo lo han tenido más fácil, pero también pusieron su voluntad.
Las tabaqueras han intentado hundir al vapeo, sí, pero no es la principal causa, tuvieron un efecto mínimo con sus vídeos y sus alarmismos, e incluso nos beneficiaron cuando la cagaban con sus argumentos y luego les batíamos (recordemos el enfermo aquel de la reacción de lípidos).
Las farmacéuticas, contrariamente a lo que se dijo en nuestros foros, no tenían un gran interés en vender en exclusiva (no han hecho nada de lo que se adivinaba que iba a ocurrir en este aspecto, ni han vetado ni han obtenido privilegios), y todas las reticencias médicas son lógicas si partimos de que casi nada de lo que nos metemos en los pulmones ha sido testado para este uso (se impone el principio de prudencia) y si partimos también de que si lo que más influye a la hora de dejar el tabaco es la fuerza de voluntad y las campañas, lo lógico es que casi todos los recursos vayan a campañas, psicología y atención primaria y no al fomento de un producto que cuando fue lanzado masivamente fracasó por sí mismo, a pesar de su márketing antihumo.
Esta es la realidad que creo aceptamos los que llevamos algo más de año y medio o menos vapeando. Los que vivieron desde antes el tema del vapeo tienen como una especie de secuestro mental que les impide aceptar que lo que largamente esperaron, el despegue de este hábito (con la esperada salvación masiva de pulmones, sucedió) pero no se materializó en lo esperado y el auge del vapeo será más lento y con un alcance menor, lo cual no está tampoco mal.