Al participar en la consulta pública sobre los productos de reducción de riesgos, las partes interesadas pueden contribuir a moldear el futuro de la normativa sobre el tabaco en la Unión Europea y garantizar que los marcos regulatorios maximicen los resultados en materia de salud pública.
Es hora de participar. La Comisión Europea ha anunciado el inicio de una evaluación del marco legislativo para la lucha contra el tabaquismo. Esta evaluación pretende valorar la eficacia y eficiencia de las medidas actuales de control del tabaco, incluidas la Directiva sobre Productos de Tabaco (DPT) y la campaña antitabaco de la Unión Europea, a la hora de reducir las tasas de tabaquismo y proteger la salud pública. La DPT regula la fabricación, presentación y venta de tabaco y productos relacionados en la Unión Europea, incluidos los cigarrillos electrónicos y los productos de tabaco calentado.
La consulta pública es una oportunidad para que las partes interesadas den su opinión sobre la equidad y eficacia del marco regulador de los productos de reducción de riesgos y sugieran formas de mejorarlo. El propósito es evaluar si el marco legislativo actual sigue siendo adecuado para los productos alternativos de consumo de nicotina. La Comisión pretende recibir datos de diversas partes interesadas, como organizaciones de salud pública, representantes de la industria, la sociedad civil y ciudadanos particulares para fundamentar su evaluación.
Según la nota de prensa de la Comisión, la Unión Europea quiere seguir a la vanguardia de los esfuerzos mundiales para reducir las tasas de tabaquismo y proteger la salud pública a través de la acción legislativa incluyendo nuevas medidas para regular los productos, prohibir la publicidad del tabaco y promover servicios para dejar de fumar.
La evaluación del marco legislativo de la lucha contra el tabaco es un paso crucial para garantizar que las medidas de control del tabaco de la UE sigan siendo eficaces y estén actualizadas frente a las tendencias cambiantes del consumo de nicotina. La Comisión Europea anima a todas las partes interesadas a participar en la evaluación y a aportar sus comentarios sobre la eficacia de las actuales medidas de control del tabaco y sugerencias de mejora. La evaluación está abierta a consulta pública hasta el próximo 6 de mayo. Puede encontrar más información sobre la evaluación y cómo participar en el sitio web de la Comisión Europea.
¡Hazte escuchar!
Los Defensores Europeos de la Reducción de Daños del Tabaquismo (European Tobacco Harm Reduction Advocates, ETHRA) hacen un llamado al público para que participe en una consulta pública sobre los productos de reducción de daños del tabaco, incluidos los cigarrillos electrónicos, el snus y los productos de tabaco calentado.
ETHRA anima a que no se pierda la oportunidad de que los reguladores reciban el mensaje de que los productos de reducción de daños del tabaco tienen el potencial de reducir significativamente los daños causados por el consumo de tabaco y que los marcos normativos deben diseñarse para maximizar sus beneficios para la salud pública, minimizando al mismo tiempo cualquier riesgo potencial. La organización anima a todas las partes interesadas a participar en la consulta y hacer oír su voz sobre esta importante cuestión.
Con este propósito, en su sitio web, ETHRA ha proporcionado orientación sobre cómo participar en la consulta y contribuir a este importante debate. Una regulación basada en pruebas y evidencias que protejan y fomenten los productos de reducción de daños es esencial para reducir los problemas causados por el consumo de tabaco y proteger la salud pública.
¿Quién es responsable?
En la Unión Europea, la cuestión de quién establece las políticas de control del tabaco se ha vuelto cada vez más polémica en los últimos años. En un lado del debate se encuentran quienes sostienen que la responsabilidad de establecer las políticas de control del tabaco debe recaer en los funcionarios públicos, que son responsables ante los cargos electos y el público. En el otro lado están los que sostienen que las organizaciones de terceros, como las organizaciones no gubernamentales (ONG) y los grupos de salud pública, deberían desempeñar un papel más importante en el establecimiento de las políticas de control del tabaco.
Los defensores de las políticas de control del tabaco dirigidas por funcionarios públicos argumentan que los funcionarios electos deberían tener la última palabra a la hora de establecer las políticas y que los funcionarios públicos deberían rendir cuentas a estos cargos y al público. También argumentan que las organizaciones de terceros pueden tener sus propias agendas que no reflejan necesariamente las opiniones del público o de los gobernantes elegidos.
Los defensores de la participación de terceros en la política de control del tabaco argumentan que las ONG y los grupos de salud pública a menudo tienen conocimientos y experiencia que resultan valiosos a la hora de establecer políticas. También sostienen que estas organizaciones pueden actuar como control del poder gubernamental y garantizar que las políticas se basen en pruebas y sean de interés público.
En última instancia, la cuestión de quién debe establecer las políticas de control del tabaco en la Unión Europea es compleja y requiere una cuidadosa consideración del papel de los gobernantes electos, los funcionarios públicos y las organizaciones de la sociedad civil. Es esencial que cualquier proceso de elaboración de políticas sea transparente, responsable y basado en pruebas y que el objetivo último sea proteger la salud pública y reducir los daños causados por el tabaquismo.
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