Una nueva supuesta asociación entre el vapeo y los ataques cardíacos parece ser el resultado de ajustes realizados a los datos que desafían la lógica.
El veterano de la ciencia basura Stanton Glantz está emocionado con un estudio que pretende demostrar que el vapeo causa ataques cardíacos (infarto de miocardio). El estudio se publicó en noviembre del año pasado, pero apareció en la oscura y poco reconocida (y posiblemente depredadora) revista Cureus y afortunadamente, los medios de comunicación nunca lo recogieron.
El autor, Talal Alzahrani, había producido previamente un estudio ampliamente criticado que afirmaba que el uso de cigarrillos electrónicos estaba asociado con ataques cardíacos, lo que incluía a usuarios duales de cigarrillos y cigarrillos electrónicos y, por lo tanto, no podía aislar el efecto del tabaquismo del efecto putativo del vapeo. Glantz fue coautor de ese estudio. Glantz mismo tuvo un estudio retractado que afirmaba que el vapeo causa ataques cardíacos. El nuevo estudio, escrito solo por Alzahrani, busca evitar el problema anterior al observar solo a vapeadores que dicen que nunca han fumado.
Como dice Glantz en su blog:
Para obtener suficientes usuarios adultos de cigarrillos electrónicos que nunca hayan fumado, Alzahrani combinó datos de las Encuestas de Entrevistas de Salud Nacional de EE. UU. de 2014 a 2021, lo que arrojó 1237 usuarios de cigarrillos electrónicos que nunca habían fumado. Después de controlar otros factores de riesgo para el ataque cardíaco, encontró que los usuarios actuales de cigarrillos electrónicos tenían 2.6 veces más probabilidades de haber tenido un ataque cardíaco que los no usuarios de cigarrillos electrónicos (IC del 95% 1.44-4.77) en comparación con los que nunca habían fumado ni usado cigarrillos electrónicos.
Esto no está lejos del riesgo asociado con el tabaquismo y es muy improbable desde el principio, ya que los vaporizadores no contienen muchas de las sustancias en los cigarrillos que se sabe que causan enfermedades cardíacas. Lo más sospechoso del estudio es que no muestra cuántos ataques cardíacos ocurrieron entre los grupos de vapeo y no vapeo. Todo lo que se nos da son los riesgos relativos ajustados.
Y debe haber habido algunos ajustes enormes porque todo sobre el grupo de vapeo implica que sufrirían menos ataques cardíacos.
Un total de 139,697 sujetos nunca fueron usuarios y 1,237 sujetos eran usuarios actuales de cigarrillos electrónicos. El análisis de datos mostró que los usuarios actuales de cigarrillos electrónicos eran significativamente más jóvenes que los no usuarios. Los usuarios de cigarrillos electrónicos eran menos propensos a ser mujeres (40% vs. 60%, p <0.01), tener diabetes (3% vs. 10%, p <0.01), tener hipertensión (11% vs. 32%, p <0.01), hipercolesterolemia (8% vs. 27%, p <0.01), tener sobrepeso u obesidad (56% vs. 65%, p <0.01) en comparación con los no usuarios.
La edad promedio de los vapeadores era de 28 años, mientras que la edad promedio del grupo de control era de 50 años. Los ataques cardíacos son muy raros entre los jóvenes y solo había 1,237 vapeadores que nunca habían fumado para estudiar. Si puedes encontrar los datos de las Encuestas de Entrevistas de Salud Nacional de EE. UU., es posible que puedas confirmar o negar, pero apostaría lo siguiente:
- En primer lugar, que hubo un número muy pequeño de ataques cardíacos entre los vapeadores que nunca habían fumado. Me sorprendería mucho si hubiera más de diez.
- En segundo lugar, que una proporción mayor del grupo de control tuvo un ataque cardíaco que los vapeadores que nunca habían fumado.
- En tercer lugar, que la supuesta asociación entre el vapeo y los ataques cardíacos es puramente el resultado de ajustes realizados a los datos que desafían la lógica.
¿Por qué más no mostraría las cifras no ajustadas? ¿Por qué no presentaría su estudio, que, si sus hallazgos fueran ciertos, sería increíblemente importante, a una revista decente?
Este artículo fue traducido y adaptado al español por el equipo de Vaping Today. Publicación original: Vaping and heart attacks. Si encuentra algún error, inconsistencia o tiene información que pueda complementar el texto, comuníquese utilizando el formulario de contacto o por correo electrónico a [email protected].
